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La anorexia nerviosa, conocida comúnmente como anorexia, es un trastorno alimentario potencialmente mortal que se caracteriza por inanición (extrema debilidad física provocada por la falta de alimento) y pérdida excesiva de peso. De hecho, uno de los criterios para diagnosticar este trastorno de alimentación es que la persona debe pesar al menos el 15% menos de su peso corporal ideal teniendo en cuenta su edad y talla. La pérdida extrema de peso en personas con anorexia nerviosa provoca problemas de salud física peligrosos, y en el peor de los casos, puede acabar con la muerte de la persona.

Siempre decimos que la salud física y mental van de la mano, y la anorexia nerviosa deja esto muy claro.

El término anorexia significa, literalmente, pérdida de apetito. Sin embargo, esta definición es engañosa, ya que, las personas con anorexia nerviosa tienen hambre a menudo, pero, rechazan la comida. Las personas con anorexia nerviosa tienen miedo intenso a engordar y se ven a sí mismas gordas, incluso cuando están muy delgadas. Las personas que padecen anorexia intentan corregir ese exceso de peso que perciben en sí mismas limitando estrictamente la ingesta de alimentos y/o haciendo excesivo ejercicio para perder peso.

anorexia nerviosa

¿Cómo se diagnostica la anorexia?

Identificar la anorexia puede ser difícil en muchos casos. Guardar la enfermedad en secreto, la vergüenza y la negación de que se tiene un problema de alimentación son características del trastorno. Como resultado, la enfermedad puede pasar desapercibida durante largos períodos de tiempo.

En la mayoría de las ocasiones se hacen pruebas médicas para descartar que haya una causa física que explique la bajada de peso. Si no se encuentra ningún problema físico, la persona suele ser derivada a un psiquiatra o psicólogo, es decir, a profesionales de la salud mental especialmente capacitados para diagnosticar y tratar enfermedades mentales. Los psiquiatras y psicólogos pueden utilizar herramientas de evaluación y entrevistas especialmente diseñadas para evaluar a la persona.

Son tres los criterios que hay que cumplir para hacer un diagnóstico de anorexia nerviosa:

  1. La persona restringe la ingesta energética en relación con las necesidades que tiene, lo que conduce a un peso corporal significativamente bajo con relación a la edad, el sexo, el desarrollo, etc.
  2. Miedo intenso a aumentar de peso o engordar, o comportamientos persistentes que interfieren con el aumento de peso. Esto ocurre incluso con un peso significativamente bajo.
  3. Alteración de la forma en que el individuo experimenta el peso o la forma de su cuerpo. Además, el peso y/o la forma corporal tienen una gran influencia en los niveles de autoestima de la persona.

¿Cuáles son los tipos de anorexia?

Cuando se hace un diagnostico de anorexia nerviosa, se debe especificar qué subtipo de anorexia padece la persona:

  1. Restrictivo: durante los últimos 3 meses la persona no ha experimentado episodios recurrentes de atracones o purgas (por ejemplo, vómitos provocados, uso inadecuado de laxantes, diuréticos o enemas). En este subtipo, la pérdida de peso se consigue principalmente a través de la dieta, el ayuno y/o la actividad física excesiva.
  2. Con Atracones/Purgas: durante los últimos 3 meses la persona ha experimentado atracones o purgas recurrentes (es decir, se ha provocado el vómito, ha empleado laxantes, diuréticos o enemas, etc. con el fin de bajar de peso).

¿Qué colectivos son más propensos a padecer anorexia nerviosa?

Los trastornos alimentarios como la anorexia son más comunes en las mujeres que en los hombres, aunque las tasas en los hombres están aumentando desde hace unos años. Igualmente, el colectivo de las personas transgénero también es más proclive a los trastornos de alimentación. Además, el riesgo de desarrollar un trastorno alimentario es mayor en actores, modelos, bailarines y atletas en deportes en los que la apariencia y/o el peso son importantes, como la lucha libre, el boxeo, la gimnasia y el patinaje artístico.

Del mismo modo, las personas con anorexia suelen tener un alto rendimiento, desempeñándose muy bien en el ámbito académico, los deportes, el trabajo, etc. Suelen ser perfeccionistas con síntomas obsesivos, ansiosos y/o depresivos. Por lo general, la anorexia nerviosa comienza en la pubertad, pero, puede desarrollarse en cualquier momento.

Causas de la anorexia

Se desconoce la causa exacta de la anorexia, pero la investigación sugiere que se debe a una combinación de factores. Entre ellos destacan ciertos rasgos de personalidad, emociones y patrones de pensamiento, así como factores biológicos y ambientales.

Las personas con anorexia, a menudo, usan la comida y la alimentación como una forma de tener control cuando se sienten abrumados por otras áreas de sus vidas. Digamos que si la persona no puede controlar ciertas situaciones de su vida, lo que si puede controlar es su alimentación y peso.

Del mismo modo, los sentimientos de insuficiencia, baja autoestima, ansiedad, ira o soledad también pueden contribuir al desarrollo del trastorno. Por otro lado, sabemos que la presión de una sociedad que equipara la delgadez y la apariencia física con la belleza también tienen un impacto en el desarrollo de la anorexia.

El hecho de que la anorexia nerviosa tienda a ser hereditaria también sugiere que la susceptibilidad al trastorno podría ser parcialmente hereditaria. Aunque algunos autores sugieren que esto ocurre porque se aprenden ciertos estilos, formas de relacionarse con la comida, patrones de pensamiento, etc. de los progenitores.

En resumen, la anorexia es un trastorno complejo y se considera que se debe a múltiples causas.

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¿Cuáles son los síntomas de la anorexia nerviosa?

Los síntomas de la anorexia pueden incluir los siguientes:

  • Pérdida de peso rápida durante varias semanas o meses.
  • Seguir una dieta o ponerse limitaciones en la comida, incluso cuando la persona está delgada.
  • Miedo intenso a subir de peso.
  • El peso y/o la forma corporal determinan en gran medida la autoestima que la persona tiene.
  • Hábitos o rutinas alimenticias extrañas, como, comer solo.
  • Sentirse gordo, incluso si la persona tiene bajo peso.
  • Incapacidad para evaluar de manera realista el propio peso y forma corporal.
  • Ser excesivamente perfeccionista y autocrítico.
  • Depresión, ansiedad o irritabilidad.
  • Uso de laxantes, diuréticos o pastillas para adelgazar.
  • Tener un interés inusual en la comida, las calorías, la nutrición y/o la cocina.
  • Períodos menstruales infrecuentes, irregulares o incluso ausentes.
  • Ejercicio compulsivo.
  • Usar ropa holgada para ocultar el cuerpo.
  • Aislamiento social.

¿Cuál es el tratamiento para la anorexia nerviosa?

Es importante contar con un plan integral para abordar las necesidades específicas de cada persona. Además, será necesario contar con un equipo de especialistas que ayuden a la persona a superar los desafíos físicos, emocionales, sociales y psicológicos a los que se enfrenta. De hecho, en los casos de trastornos de alimentación los psicólogos solemos trabajar junto a otros profesionales.

Algunas de las estrategias incluyen las siguientes (aunque no siempre usaremos todas ellas a la vez):

  • Terapia cognitivo-conductual: puede ayudar a la persona a encontrar nuevas formas de pensar, comportarse y manejar el estrés.
  • Trabajo con la familia en el caso de ser necesario.
  • Acompañamiento de un nutricionista con el fin de que proporcione información sobre cómo utilizar los alimentos de forma saludable. Además, de restablecer los patrones normales de alimentación y seguir una dieta equilibrada.
  • Medicación para tratar la depresión y la ansiedad.
  • Suplementos para resolver las deficiencias nutricionales.
  • Tratamiento hospitalario (solo en los casos más graves en los que sea necesario)

Es importante comprender que el tratamiento supone un desafío para la persona que sufre anorexia. Además, pueden ocurrir recaídas como parte de este proceso. El apoyo de la familia y amigos es importante. Comprender el problema, identificar sus síntomas y acompañar y reforzar al paciente será de mucha ayuda.

¿Cómo se puede prevenir la anorexia nerviosa?

Enseñar y fomentar hábitos alimenticios saludables y actitudes realistas sobre los alimentos y la imagen corporal puede ser útil para prevenir los trastornos alimentarios. Quizás, no sea posible prevenir todos los casos de anorexia, pero enseñar distintos tipos de cuerpos, consumir las redes sociales de forma sana, trabajar en la aceptación de uno mismo, etc. ayudará a prevenir este tipo de dificultades. Enseñar a las niñas a tener una imagen corporal saludable, es esencial.

¿Cuándo debo buscar ayuda para la anorexia nerviosa?

Si sospechas que tu o alguna persona de tu entorno padece anorexia, busca ayuda lo más rápido que puedas. Los trastornos alimentarios se vuelven cada vez más peligrosos con el paso del tiempo.

Puedes pedir una cita con tu doctor de cabecera o acudir a un psicólogo o psiquiatra directamente.

En el caso de que un ser querido padezca anorexia y no quiera ir a terapia, puedes pedir una cita con un psicólogo o psiquiatra y acudir tu. Se que lo ideal es que la persona que tiene la dificultad vaya al psicólogo, pero en muchas ocasiones se niegan a reconocer que tienen un problema. Por ello, puede ser una buena idea que acuda una persona de su entorno para que pueda recibir pautas y saber cómo gestionar la situación.

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Infografía sobre la anorexia nerviosa

Tengo un post especifico en el que hablo sobre trastornos de alimentación en personas transgénero de manera especifica. ¡Solo por si quieres pasarte a leerlo!

Referencias bibliográficas

  1. American Psychiatric Association. (2014). Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales DSM-5. Madrid: Editorial Médica Panamericana.
  2. Garber, A. K., Cheng, J., Accurso, E. C., Adams, S. H., Buckelew, S. M., Kapphahn, C. J., … Golden, N. H. (2019). Weight Loss and Illness Severity in Adolescents With Atypical Anorexia Nervosa. Pediatrics.
  3. Maguire, S., Li, A., Cunich, M. y Maloney, D. (2019). Evaluating the effectiveness of an evidence-based online training program for health professionals in eating disorders. Journal of Eating Disorders, 7, 1. DOI10.1186/s40337-019-0243-5.
Iratxe López Fuentes

Iratxe López Fuentes

Soy Iratxe López, Doctora cum laude en Psicología por la Universidad de Deusto y Psicóloga Clínica. Además, cuento con la Habilitación Sanitaria, lo que me permite ejercer como Psicóloga Clínica y ver pacientes. He atendido pacientes con diferentes dificultades psicológicas y emocionales, como, problemas de autoestima, ansiedad, depresión, duelos, problemas de conducta, dificultades en las relaciones sociales... Por último, me gustaría destacar que tengo la gran suerte de ser la directora del Centro Iratxe López Psicología.

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